BEGOÑA SIERRA 12/10/2014
HUESCA.- El Planetario de Huesca acogió el viernes una visita con carácter solidario enmarcada dentro de la agenda de actividades del Día Internacional del Voluntario Telefónica. Un total de veinte personas con discapacidad física y movilidad reducida de la Residencia Pomarón de la Fundación Disminuidos Físicos de Aragón (DFA) de Zaragoza disfrutaron de charlas, talleres y visitas guiadas por el edificio del Espacio 0.42 gracias al apoyo de veinte voluntarios, once de ellos de Telefónica, que conmemoraron así este día.

En total, más de 3.000 empleados de la empresa participaron en toda España en 800 actividades y la cifra de colaboradores se disparó hasta los 14.000 en todo el mundo, según detalló Ricardo Almuní, voluntario de Telefónica y coordinador de esta actividad en Huesca, quien añadió que la jornada se celebró en los 40 países en los que opera el grupo.

«La Fundación Telefónica lleva muchos años dando apoyo a persona que lo necesitan y el proyecto de voluntarios surgió para que los trabajadores dieran salida a su generosidad y a su altruismo de forma que pudieran colaborar con otras entidades y aportar así su granito de arena para hacer más llevadera y feliz la vida de muchas personas», explicó Almuní.

Javier Velilla, trabajador social de DFA Aragón, agradeció a Telefónica la financiación de esta actividad, tanto por los recursos económicos aportados como por el apoyo de sus voluntarios, ya que de otra manera los usuarios de DFA no hubiesen podido visitar el Planetario. «Durante todo el año hacemos actividades de ocio y tiempo libre para favorecer la integración. Las personas con discapacidad necesitan mucha atención y deben estar acompañados para realizar este tipo de visitas», explicó.

Los participantes vivieron con intensidad esta visita. «Muchas personas con discapacidad no tienen los recursos suficientes para acceder a actividades de esta envergadura. Todos están disfrutando mucho por el simple hecho de salir y de pasar un día con los voluntarios, cuyo espíritu siempre es el de estar con los demás y animar a quienes lo necesitan», comentó.

Antes de acudir al Planetario, los miembros de DFA investigaron por internet sobre lo que iban a ver tanto en el Espacio 0.42 como en Huesca ciudad y prepararon juegos para pasar la tarde.

Rosa Gómez, una de las participantes, estaba muy ilusionada. «Es un viaje que nunca había hecho y estoy viendo cosas muy interesantes. Hemos visto las constelaciones y todo gracias a los voluntarios porque sin ellos no podríamos venir», dijo.

También su compañera Esther Serrano disfrutó con la actividad. «No me imaginaba el Planetario así, tan grande», comentó acompañada por la voluntaria de Telefónica Montserrat Juanes, para la que este tipo de actividades suponen «ver otras necesidades y realidades por las que puedes hacer algo que tiene sentido».

«Si no nos ofrecemos estas personas no tendrían la ocasión de salir de la residencia», comentó mientras lanzaba un llamamiento al resto de sus compañeros para que se sumen a las tareas de voluntariado.

Sandra Rico, otra de las voluntarias, realizaba su primer servicio como tal. «Es una buena experiencia poder compartir tu tiempo y ellos lo viven con tanta ilusión que resulta muy gratificante por el simple hecho de verles así», dijo.

Este entusiasmo quedó latente en la sorpresa que causó el taller sobre cohetes y las numerosas cuestiones que plantearon los visitantes en la charla sobre planisferios y el sol que impartió Javier Trallero, monitor del centro, que aseguró que los visitantes mostraron muchas inquietudes.

Tras visitar el Planetario, los participantes se trasladaron a la sede de DFA en Huesca donde celebraron una comida de convivencia. Por la tarde, pasearon por el centro de Huesca para descubrir una ciudad que también les sorprendió durante una jornada para recordar.

Fuente: Diario del AltoAragón, 12/10/2014.