Alfredo Quintana Machín, el periodista y abogado, que padece espina bífida, ofrece hoy una charla en la Cruz Blanca.
«Me considero una persona como cualquier otra. No tengo sensibilidad de rodilla para abajo, pero hay quien no sabe utilizar un ordenador o atarse los cordones. Todos tenemos nuestras limitaciones, y creo que hay superarse a uno mismo cada día».
BEGOÑA SIERRA 13/01/2017
HUESCA.- Con estas palabras cargadas de fuerza resume su experiencia vital Alfredo Quintana Machín (Zaragoza, 1985), un licenciado en Derecho y Periodismo que a pesar de padecer espina bífida no entiende de límites ni de barreras. El joven, autor del libro Yo, discapacitado, expondrá su particular visión de la discapacidad durante la charla que impartirá hoy, a partir de las 18:30 horas, en la Casa Familiar San Lorenzo de Huesca.
El autor lanzará un mensaje cargado de optimismo, el mismo con el que él afronta cada jornada. «No hay nada que me impida hacer actividades», afirma Quintana, que trabaja como gestor de contenidos en una firma internacional y que presume de viajar por toda Europa y de salir con sus amigos de fiesta como cualquier otro chico de su edad.
A Quintana no le faltan motivos para sonreír. «Sé que no puedo subir el Everest, pero aunque conozco mis límites no se me pone nada por delante», explica este joven que anima a todas las personas a decidir por ellas mismas, «para que nadie te diga lo que puedes o no puedes hacer y llegues al máximo», apunta.
Cuando se refiere al término «discapacidad» dice que no es sinónimo de ser diferente y comenta que hace unos días una amiga le dijo que se le suele olvidar que él padece espina bífida. El valor para salir adelante, a pesar de sus muchas operaciones y de moverse con muletas, se lo inculcaron sus padres «desde el minuto uno».
«Rendirte no es una opción, hay que tirar hacia adelante con lo que venga», afirma este joven que recuerda que cuando se caía en el parque de niño su madre dejaba que se levantara por él mismo, algo que sigue haciendo hoy en día. «Me voy todos los fines de semana a Lérida a ver a mi novia y me desenvuelvo estupendamente», indica.
Quintana invita a los oscenses a acudir esta tarde a su charla en la que podrán conocer a una persona con discapacidad a la que nada le frena. «Con mi espina bífida podría estar todo el día en el sofá, pero él y yo nunca nos hemos llevado bien», bromea.
Fuente: Diario del AltoAragón, 13/01/2017.