La cita fue inaugurada ayer de forma oficial en medio de una gran animación.
El alcalde de Huesca, Luis Felipe, junto a otros miembros de la Corporación Municipal, acompañaron a Nuria del Río, presidenta de Asapme, y a numerosos vecinos de la ciudad en la inauguración oficial de este mercado, enmarcado en el III Festival «Huesca, Leyenda Viva», y cuyos 70 puestos ya abrieron al público el viernes por la tarde registrando una alta afluencia de visitantes.
En medio de una bulliciosa animación, Luis Felipe resaltó el valor de esta cita anual de la ciudad con Asapme «que pone en valor uno de los elementos fundamentales de esta entidad, la perseverancia, la constancia en el trabajo y el buen hacer en su labor asistencial y con este mercado que ayuda a visibilizar un aspecto importante de la discapacidad».
Y es que, la realización del mercado medieval está enmarcada dentro de los actos que Asapme ha programado con motivo del día de la Salud Mental, que se conmemorará el próximo 10 de octubre bajo el lema «Soy como tú aunque aún no lo sepas».
El primer edil también destacó el carácter dinamizador de este mercado que se combina perfectamente con lo que es «un impulso comercial para la zona y ayuda al desarrollo económico de la ciudad».
Por tanto, añadió, se consiguen diferentes objetivos con una buena causa como la que lleva adelante Asapme.
Además, indicó que este importante encuentro medieval se enmarca en el gran programa de actividades que ofrece el Festival Leyenda Viva, «una de las señas de identidad que Huesca quiere poner encima de la mesa y que este mercado ayuda a visibilizar en todo su esplendor».
Por su parte, Nuria del Río, comentó que el mercado medieval que organiza cada año Asapme, y que cumple ya su decimoquinta edición, tiene como objetivo sensibilizar a la sociedad acerca de la problemática de la enfermedad mental.
«Queremos da a conocer la empatía que se necesita para atender a este colectivo y conocer también sus necesidades desde el respeto», comentó la presidenta, que agradeció al Ayuntamiento de Huesca las facilidades que les brinda para celebrar este encuentro.
Del mercado, resaltó que es una cita «de sensibilización, de integración» al que se suman otras entidades del colectivo de la discapacidad como la Fundación Agustín Serrate, Cruz Blanca, Atades Huesca con Brotalia y Semonia, y la Fundación Bolskan.
Todas ellas muestran los productos realizados por las personas que participan en los centros especiales de empleo y los talleres ocupacionales.
En el resto de puestos los vendedores ofrecían productos de todo tipo. Jaime Amores, de Madrid, vende en su estand juguetes de madera artesanales fabricados en un taller de Alicante. «Vamos por las ferias de toda España. Esta es la cuarta vez que vengo a Huesca y el mercado no está nada mal. La gente se interesa por la feria y compra bastante», detalló rodeado de diábolos, puzles, flautas, armónicas, sonajeros, marionetas, espadas, arcos y escudos de madera.
Aquellos a los que les pique el gusanillo del hambre entre tanto ir y venir de puesto en puesto tiene a su disposición un buen puñado de puestos de comida. Claudia Horn ofrece salchichas y hamburguesas caseras en su puesto «Taberna alemana».
«Tenemos cuatro salsas con cebolla caramelizada para combinar. La gente aquí ya nos conoce y nuestros productos gustan mucho», explicó esta peculiar mesonera del siglo XXI que lleva tres años asistiendo al mercado medieval de Huesca.
Silvina Ierino, una artesana argentina que reside en Ciudad Real, vende en el mercado bisutería y sacos térmicos rellenos de semillas. «Es un sistema muy antiguo que ya utilizaban los egipcios. Una vez calentados en el microondas los saquitos se pueden aplicar en contracturas y zonas doloridas o también en los pies o las piernas», explicó sobre su producto estrella.
También Aitor López, de Bilbao, triunfa en el mercado con su bonito y anchoas en conserva. «También tengo en el puesto espárragos de Navarra y pimientos», dijo este comerciante que lleva cuatro años visitando el mercado medieval de Huesca, donde ya tiene una buena clientela.
Y mientras los oscenses se daban algún capricho comprando en los puestos, bailarinas, orcos y matasanos arrancaban más de una sonrisa a los asistentes. En la plaza de San Pedro, los niños disfrutaban del Parque de Atracciones Medieval, de la escuela de pequeños escuderos y del campamento militar de Alfonso I El Batallador. La sorpresa hacía que algunos confundieran la noria con un gran molino, mientras otros se decantaban por montarse en el barco pirata o el tiovivo. El festival Huesca Leyenda Viva ofreció ayer por la tarde el concierto de Via Artis en la ermita de Salas y, por la noche, la representación teatral de la Campana «De Waska a Huesca» enamoró a quienes se acercaron a ver esta obra a la plaza de la Universidad. Hoy el festival ofrece la posibilidad de visitar el Mercado medieval, de 11 a 15 y de 17 a 20 horas, y también la representación de la coral in lingua franca del Lycée Français Molière de Zaragoza, a las 12 horas, en el patio Interior del Museo de Huesca. Como final de fiesta, a las 19 horas, en el Paseo de la Muralla, los Titiriteros de Binéfar ofrecerán un espectáculo especialmente preparado para la ocasión que bajo el título «Rondan Juglares» contará, además, con la visita sorpresa de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos de Huesca.
Fuente: Diario del AltoAragón, 18/09/2016.
